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Desde las piscinas de Artica en las afueras de Iruña comenzamos el recorrido dirigiéndonos hacia el pueblo de Artica. Tras recorrer 250 m en dirección Este cruzamos la pasarela que pasa por encima de la Ronda Norte de Pamplona. Cruzamos el pueblo en dirección Norte en apenas 500 m por la parte más oriental del mismo hasta salir al camino que asciende hacia la cima. En dirección Norte-Noroeste llegamos en un kilómetro hasta la carretera que sube al fuerte. Cruzamos y seguimos en la misma dirección otros 370 m hasta volvernos a juntar con la carretera. En 800 m nos situaremos en la explanada superior. El fuerte a nuestra izquierda. Las antenas y la senda que conduce al monumento-placa dedicada a los fusilados del fuerte (en el mismo cordal que baja hacia Orvina) a nuestra derecha. En poco más de una hora ya estamos arriba, alrededor de 3 km de subida. Hace bastante frío y el aire y la fina lluvia que cae de cuando en cuando hace que sea un día bastante desapacible. 

Nos dirigimos a la entrada del fuerte donde nos está esperando Iñaki (que gran tipo). Inaki Alforja es el autor del libro y video-documental; Ezkaba, la gran fuga de las cárceles franquistas. Nos contó la historia del fuerte, cuándo, cómo y por qué se construyo (curioso el dato de que cuando terminó su construcción éste ya se había quedado obsoleto). Nos enseñó distintas zonas del fuerte y nos introducimos por el interior de varias galerías... nos llevó al "cementerio de las botellas", nos habló de la fuga del 38...las condiciones de vida de los reclusos, etc. En fin, todo un lujo.

Tras despedirnos de Iñaki y almorzar un poco descendimos hacia los coches por el mismo camino de subida ya que el tiempo se nos ha echado encima y hacer un recorrido circular (idea inicial) supondría alargar en exceso el regreso. Y es que ya es hora de comer.

Datos del recorrido
Distancia recorrida: 8,2 km
Tiempo sin paradas: 2h 39'
Tiempo total: 4h 34'
Desnivel acumulado: 528 m
Desnivel máximo: 442 m
Cimas: Ezkaba-San Cristobal (895 m)

 
Mapa del recorrido

La foto del día: Iñaki Alforja, mila esker

Foto de grupo
Con los bastones
Entre la niebla
Charlando

Con los perros
hacia el fuerte

Fachada principal

Atentos a las explicaciones

Bajando
Galerías del terror
Salida sin final
Escalera hacia el infierno
Interiores
Fosos
Circunvalando el fuerte
Buzón
Mojón y buzón
Antenas
El cementerio de las botellas
Coronación del muro

El track

Comentarios

Autor

Erripamendi Taldea
 
Monte que vigila Iruña desde su parte Norte.  Actuando de barrera climática entre el laberinto de valles que se extienden hasta el Cantábrico y las redondeadas colinas y campos de cereal de la Cuenca, la montaña se abre a dos aguas sobre un eje que va de Noroeste a Sureste. En sus cinco kilómetros de recorrido el monte separa Iruñerria más más concretamente la antigua Cendea de Antsoain (hoy Berrioplano, Berriozar, y Antsoain) y Pamplona, del valle de Ezkabarte con el que antes se comunicaba por la zona del Polvorín y el portillo final de Azotz. Actualmente una amplia vía de ronda delimita el monte en su ladera Sur. Fuerte de Alfonso XII A finales dei siglo XIX la defensa de Pamplona se trasladó a las eventuales zonas de acoso artillero, por lo que las alturas de Ezkaba pasaron a ser militarizadas. Tras más de treinta años de obras, la cima se convirtió en un abigarrado conjunto de casamatas, cuarteles y galerías excavado en la roca y rodeado por un profundo foso, que fue pomposamente inaugurado en 1919 con el nombre de Fuerte de Alfonso XII. Sorprendentemente nunca llegaron a instalarse los cañones. Fue esta vez el auge de la aviación el que hizo inútil ese esfuerzo faraónico. Pero pronto se le encontró al recinto otro destino aún más siniestro. A partir de 1934 fue empleado como penal de presos políticos, uso que continuó durante la guerra civil de 1936 y su posguerra. www.medikat.net
22 de Mayo de 1938  Los 2.500 presos que había allí el 22 de mayo de 1938 soportaban unas condiciones de hacinamiento, malnutrición y malos tratos diversos. 796 decidieron jugarse la vida y la libertad a cara y cruz. Quizá muchos sintieron lo mismo que Leopoldo Cámara que, cuando atravesó la puerta principal del fuerte el 22 de mayo de 1938, gritó con toda su alma “¡Viva la libertad!”. Dice que nunca lo podrá olvidar porque fue “el momento más feliz de mi vida”.
Ese día se produjo la fuga más numerosa de todas las registradas en penales. Fueron 796 los fugitivos, en su mayoría presos políticos republicanos, de los que únicamente escaparon 3, muchos murieron en el intento y el resto fueron capturados y devueltos al penal. Catorce de los promotores de la fuga fueron ejecutados, fusilados días más tarde de su captura en la Vuelta del Castillo.
El plan fue urdido por Leopoldo Pico, quien también se pondría al frente en el momento de su ejecución. A la hora de la comida, con la ayuda de los presos que estaban haciendo servicios, Pico redujo a los guardianes y abrió la puerta de la cárcel vistiendo gorra y abrigo de guardián y con una pistola en la mano. Con el disfraz logró distraer a la tropa que vigilaba el fuerte y que en ese momento estaba en el comedor. Los presos cogieron las armas de los soldados y atacaron el único punto de resistencia, las garitas de vigilancia. En unos minutos, el control del fuerte había cambiado de manos. Los hombres de Pico abrieron las puertas de las galerías e invitaron a salir a los presos. Casi todos salieron corriendo, pero también muchos regresaron a sus celdas al intuir que la aventura no tenía posibilidades sin ningún apoyo exterior y después de que su única ventaja, la sorpresa, desapareciera casi inmediatamente con la huida de dos centinelas de las garitas de vigilancia. La toma del fuerte se saldó con un muerto, un guardián al que los fugados golpearon cuando estaba dando una alerta que de haber sido efectiva les habría desbaratado todo el plan. Escondidos de día y caminando de noche, poco a poco el cansancio, el agotamiento, el hambre y el miedo,  hicieron mella en los fugitivos que uno tras otro iban siendo capturados, otros se entregaban, muchos ejecutados en el mismo lugar de la captura. 
Iñaki Alforja  Iñaki Alforja Sagone (Iruña, 1967) es el guionista y realizador del documental Ezkaba: La gran fuga de las cárceles franquistas, un proyecto en el que ha trabajado durante tres años. Profundo conocedor de la historia de la prisión del fuerte de San Cristóbal, ha realizado entrevistas a muchos de los protagonistas de la histórica fuga del año 1938, plasmadas en el libro “Fuerte San Cristobal 1938. La gran fuga de las cárceles franquistas” del que es coautor con el historiador Félix Sierra. Durante su trayectoria profesional como cámara y realizador, ha trabajado para televisiones -ETB, Agencia EFE-, productoras y O.N.G,s de América Latina- Es miembro fundador del colectivo de comunicación audiovisual Eguzki Bideoak. El sábado 16 de Noviembre se proyectará el audiovisual; Ezkaba, la gran fuga de las cárceles franquistas a las 19:30 H. en el gaztetxe de Pueyo.
La salida montañera está prevista a las 9:00 H. del domingo 17 de Noviembre desde Pueyo para dirigirse en coches hasta el parking de los corralillos del gas en Iruña para desde allí subir a Ezkaba hacia las 9:30 H. Nos acompañará Iñaki Alforja con la suerte que hará de guía para nosotros. Por otro lado hemos intentado que la autoridad militar nos diera permiso para acceder al interior del fuerte pero no a sido posible, una pena.  
< Que ha pasado para que el barro guarde tus pasos antes de salir
Quizás el hambre fue la culpable de querer escapar subiendo hasta el cielo
Sin más instrumento que tu propio cuerpo encadenado a los huesos
Y al montón de piojos
Que guarda este infierno donde se queman todos los sueños
Y sin esperanza se arde
Que ha pasado para que el barro guarde tus pasos antes de salir
Hacinamiento, trato inhumano, sólo el deseo de sobrevivir
Y salir corriendo para abrazar a la libertad que está esperando tras la puerta
Fecha para no olvidar (22 de mayo), fue la fuga del penal (22 de mayo)
Ezkaba todavía es (22 de mayo) la rabia allí enterrada (22 de mayo)
Buen momento es la hora de la cena cuando pasan el caldero los centinelas
Hacerse con las llaves de las cancelas y en media hora ¡ya están fuera!
Va oscureciendo, llegan las fuerzas con potentes reflectores y cortando carreteras
No hubo lucha, ni resistencia, de cadáveres descalzos sembraron las laderas
A doscientos siete les costó la vida, sólo tres pasaron la frontera
En el diario oficial una nota escueta fue su triste réquiem
Fecha para no olvidar (22 de mayo), fue la fuga del penal (22 de mayo)
Ezkaba todavía es (22 de mayo) la rabia allí enterrada (22 de mayo)

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Autor

Erripamendi Taldea